Mauro Piñeyro, tecladista original de Ráfaga, rememora el ascenso a la fama de uno de los grupos históricos de la cumbia argentina.

A finales de 1994, un grupo amigos de barrio se juntó para iniciar lo que 24 años después se convertiría en uno de los grupos referentes de la cumbia en Argentina: Ráfaga.

Mauro Piñeyro, exmiembro y ahora mánager de la agrupación, recuerda cómo todos ellos, inexpertos en la industria, se embarcaron en esa aventura sin imaginar que su éxito sería tan grande.

“La verdad, no sabíamos que íbamos a llegar a tanto”, confiesa Mauro Piñeyro, en entrevista con La República.

En su camino, Ráfaga produjo quince discos, algunos con mayor éxito que otros, como lo fue Imparables, su tercer álbum de estudio, lanzado en 1999.

“Fue uno de los mejores momentos de Ráfaga”, reconoce Mauro. “Ahí estaban las canciones ‘Mentirosa’, ‘La luna y tú’ y ‘Maldito corazón’. Recorrimos el mundo con ese disco. Nos hicimos conocidos en el mundo gracias a ese álbum”, rememora.

Beber del éxito sin embriagarse no resulta fácil, algo que el manager de Ráfaga pueda dar fe ahora, al recordar con una mirada madura cómo vivió el grupo ese primer momento de gloria. “No teníamos la edad, la experiencia suficiente para vivirlo como teníamos que vivirlo. No nos dábamos cuenta de que era tan importante”, explica.

Uno de sus periodos más oscuros en la historia de Ráfaga se encadena a su segundo resurgimiento. En 2003, Ariel Puchetta, la voz del grupo, anuncia su separación para lanzarse como solista. En su reemplazo entra Rodrigo Tapari. El ingreso del nuevo vocalista se hizo en un contexto muy difícil.

“Argentina estaba muy castigada por la economía. Tuvimos que llevar nuestra música a Chile, España y Perú, entre otros”, recuerda Mauro, para agregar con orgullo: “Comenzamos a remar otra vez. La verdad, hicimos un muy buen trabajo en conjunto para sacar a Ráfaga a flote”.

Con Rodrigo Tapari la agrupación vuelve a gozar del éxito con el tema “Una cerveza”, una de las cumbias más famosas y bailadas en Latinoamérica.

En 2017, también persiguiendo el sueño de ser solista, Rodrigo abandona Ráfaga. Un mes después, Ariel vuelve al grupo.

“El regreso de Ariel a Ráfaga fue un momento importante, emotivo… un tema de sentimientos, de volver a encontrarnos. Porque más allá de la música, la mayoría de los integrantes de Ráfaga nos conocemos del barrio, de la adolescencia”, explica Mauro Piñeyro.

El extecladista también comenta la paradoja que significó que Rodrigo cantara las canciones que hizo famosas Ariel, y cuando este volvió a Ráfaga, le tocara interpretar los temas que el otro llevó al éxito.

A pesar de no conocerse ni hablarse nunca, según afirma Mauro Piñeyro, en las últimas semanas Ariel Puchetta y Rodrigo Tapari fueron objetos de una polémica.

“Lo que pasó es algo mínimo, que en pocos días ya se olvida”, dice Mauro, señalando que el malentendido se ha producido por comentarios de terceros.

De igual forma, también juega con la idea de que Ariel Puchetta y Rodrigo Tapari puedan compartir escenario juntos. “Personalmente para mí, eso va a suceder”, predice el mánager de Ráfaga.

El aniversario de Ráfaga
Este sábado 27, la agrupación se alista para celebrar sus 24 años con sus fans a través de un streaming en su cuenta oficial en Instagram. Aunque, Mauro Piñeyro ya adelanta que para su 25 aniversario, el de oro, están planeando ‘tirar la casa por la ventana’ con una gira de conciertos internacionales siempre y cuando la actual crisis del coronavirus (COVID-19) logre superarse.

Mientras tanto, Ráfaga sigue trabajando y produciendo música. “Para ganar tiempo”, como dice Mauro Piñeyro.

La República