Dicen que nunca llegó a pensar que triunfaría en el panorama musical, y menos que lo haría por todo lo alto

Anoche le dio la puntilla. Julio Iglesias veía que su hijo Enrique le desbancaba como el mejor artista latino de todos los tiempos. En la gala de los prestigiosos premios Billboard Latinos se consumó lo que el veterano Julio nunca se hubiera esperado. Su hijo es el rey y él, en todo caso, el príncipe.

Iglesias padre no quería que su vástago siguiera sus pasos como cantante, se entero cuando el primer disco de su hijo ya estaba en el mercado. Y fuentes de su entorno desvelan a nuestra web que los celos del mediático papá comenzaron al subir la popularidad de Enrique, que actualmente lleva vendidos ciento ochenta millones de discos.

Este miércoles por la noche, el veterano Iglesias veía por televisión la gala, no estaba presente para felicitar a ese gran artista que lleva su sangre. Dicen que nunca llegó a pensar que triunfaría en el panorama musical. Y menos que lo haría por todo lo alto. Son contadas las ocasiones en las que los dos han coincidido bajo el
mismo techo, años sin verse ni llamarse por teléfono. Son como polos opuestos, que no se atraen lo más mínimo.

Fuente: Larazon.es