Se debe prestar dinero a las amistades?
Tal y como está la situación general puede que alguna amiga se encuentre en un apuro financiero y piense en ti como su arca de salvación. Te ayudamos a tomar la mejor decisión.
Dicen que mezclar amistad y dinero nunca sale bien pero, ¿qué puedes hacer cuando tu mejor amiga está atravesando un mal momento económico y te pide ayuda a gritos? La decisión final es solo tuya, pero te ayudamos a valorar todas las posibilidades y consecuencias.
Primero: Valora la amistad. ¿Muy amigas? ¿Hace cuánto tiempo que conoces? ¿Confías en ella? Si todas estas preguntas te llevan a una misma respuesta que es: «somos más conocidas que amigas», descarta la opción de dejarle dinero. Si de lo contrario son
amigas íntimas, continua valorando tu decisión.
Segundo: Estudia tu capacidad económica. Puede que tu situación sea mejor que la suya pero, ¿puedes permite ese préstamo? Piensa que existe una pequeña posibilidad de que nunca te lo devuelva o tarde demasiado tiempo, y tienes que pensar si realmente necesitarás esa cantidad de dinero en un futuro próximo.
Tercero: Pon límites. Has decidido dejarle el dinero, pero las normas las debes poner tú. El plazo límite para devolvértelo, si fijas o no intereses y, aunque sea difícil, la firma o no de un documento por escrito. Valora las condiciones.
Cuarto: No rompas tu amistad. Si después de todo crees que este préstamo puede poner fin a vuestra relación, díselo con sinceridad y confiésale que prefieres no dejarle el dinero por ese miedo. Sea como sea, eres tú quien debe decidir si lo dejas o no.